En la siguiente reflexión quiero dejarte alguna de las claves para que puedas superar ese sentimiento de vacío sin recurrir a la alimentación emocional de una forma natural y progresiva a través de la cocina intuitiva.

 

Reflexiones sobre el vacío emocional y su relación con la cocina

Sigue la rueda de este largo camino dónde el final se difumina en el momento que mi ser deja el cuerpo, cuerpo que siente y experimenta, placer, dolor, frío, calor, ¿las dos a la vez? Cuando siento temblor y el ansia en el pecho aprieta fuerte, el estómago se transforma en un agujero negro sin límites ni escalas a ningún sitio, sólo el gran vacío del espacio. Como para alimentar, nutrir, llenar, saciar, disfrutar, vivir…

La alimentación emocional y el impulso de utilizar la comida para rellenar ese vacío

En este caso para llenar el vacío que deja el abismo de la verdad en mi interior, vacío que intento llenar a través del dulce sabor del chocolate y otros alimentos similares que me traigan desde fuera ese abrazo interior que necesito. Como un robot en piloto automático se repite el mismo patrón, pensamientos a mil por hora, respiración acelerada, me siento desubicado y sin darme cuenta estoy bajando escalón tras escalón esas escaleras que me llevan al lugar de mi sentir, la cocina. Espacio de creación y transformación, ya puedo ver lo que me espera dentro de tus armarios, lo siento entrando en contacto con mis labios y deslizándose hacia el interior de mi boca para ser triturado por mis dientes y ingerido hacia el interior.

La conciencia plena como herramienta para transformar tu relación con la comida

Pensando en no caer en lo mismo de siempre mi cuerpo sin hacer ningún tipo de caso a los pensamientos ha preparado encima el mármol todo lo necesario para tapar momentáneamente ese vacío infinito. Todo está listo para que inicie el embiste contra la comida cuando de golpe una respiración profunda me hace caer en cuenta de que por mucho que repita la frase de que no lo voy a hacer ya lo estoy haciendo, otra vez el mismo patrón de siempre, talvez ha llegado el momento de hacer las cosas de una manera distinta, ahora tengo las herramientas… un último vistazo y todo vuelve a su sitio, al lugar dónde los sueños aún están por ser escritos. Respiro, sonrío, y paso a paso subo otra vez para alimentarme de lo único que puede llenar ese vacío, el AMOR.

Prácticas de autoobservación en la cocina

El vacío no se puede llenar, tan solo se puede reconocer, observar cómo lo que es y una vez sucede eso y sale la emoción que estaba induciendo a ese sentimiento todo se transforma y regresa la consciencia de lo que es y lo que siempre ha sido, la unión con el todo.

Parece que la forma más sencilla de llenar ese vacío es a través de la comida y me parece muy lógico, sientes un vacío, un espacio el cual tienes la necesidad de llenar y por una cuestión fisiológica si hay un vacío en tu interior de primeras lo único que puedes utilizar para llenarlo es algo que introducido en tu interior no te mate y te de esa sensación de plenitud que buscas, lo que puedes hacer de manera más fácil es comer algún alimento que en tu interior va a llenar ese vacío, ese espacio… lástima que eso sólo funcione unos momentos y luego esa sensación regrese con igual o más fuerza que la anterior y tengas que volver a recurrir a ese placebo para no indagar en ti  y descubrir realmente lo que esta provocando ese “vacío”.

Observar nuestras reacciones automáticas requiere de práctica y auto observación, de mucha paciencia y cariño con uno mismo, similar a jugar al escondite, no quiere que las atrapen y se esconden muy bien, por eso es necesaria esa calma desde la que poder acercarse a la indagación. Si consigues atraparte en ese momento impulsivo que estás a punto de repetir el mismo patrón de siempre simplemente detente un momento, mira lo que estás a punto de comer, respira profundamente llenando tu abdomen y pregúntate porqué lo necesitas ¿es realmente hambre o solo un parche? Tal vez seguir respirando unos segundos más observando los pensamientos que aparecen te ayude a descubrir por que estás intentando tapar ciertas emociones. Puedes hablarle a lo que sea que estabas a punto de comerte, decirle por que lo ibas a utilizar y preguntarle que si es realmente capaz de proporcionarte eso que estás buscando. Descubrir las respuestas y atenderlas con comprensión puede ser muy liberador y el primer paso para transformar esta relación con los alimentos.

Una vez llegados a este punto puedes hacer esta meditación para soltar esa prisa y volver a conectar con tu presente.

La cocina intuitiva y la alimentación consciente puede ser el camino hacia el amor propio

¿Te gustaría saber cuáles son los pasos para integrar estas técnicas en tu vida?
Si te gustaría tener una primera toma de contacto o tener más información sobre los próximos cursos y talleres puedes escribirme por correo electrónico.

Yo mismo te acompañaré de forma personalizada en los talleres y en los cursos de cocina intuitiva para que así puedas transformar hacia el bienestar tu relación con la comida.

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